EN Puerto Rico hay muchas propuestas sobre la mesa y ante las agencias para construir plantas de generación de energía a base de la combustión de los desperdicios sólidos. Como dicen por ahí, “no hay cama para tanta gente”. Una planta de conversión de energía requiere combustible (basura) 24 horas al día y 7 días a la semana. En Puerto Rico no se genera suficiente basura para alimentar estas plantas. Además los mismos materiales que debemos de reciclar componen gran parte del combustible de una planta de conversión de energía. El combustible de estas plantas consiste de papel, cartón, madera, material vegetativo, plásticos, comida y material orgánico en general. Si reciclamos todos estos materiales como debiera de ser, ¿cuánto combustible nos queda para operar estas plantas de forma eficiente y costo efectivas? Por otro lado el costo por tonelada para quemar basura es relativamente alto y me pregunto si el pueblo está dispuesto a pagar costos elevados por quemar la basura. Un municipio con recursos económicos limitados buscará la opción más económica disponible.

Otro punto importante en este asunto es que hoy en Puerto Rico es menos costoso tirar la basura a un vertedero municipal que hacer reciclaje o usar otras alternativas “verdes”. Muchos de los vertederos municipales están en mal estado y no cumplen con las leyes y reglamentos ambientales. Un municipio que opera un vertedero sin cumplir con los reglamentos tiene costos operacionales muy bajos y por lo tanto no tiene ningún incentivo para reciclar o buscar alternativas verdes. Mientras el gobierno permita que estos vertederos municipales sigan violando la ley no habrá reciclaje ni alternativas verdes que se puedan implementar efectivamente.